Cuando parecía que los Saraperos enderezaban el rumbo tras la dolorosa derrota del viernes, Caliente de Durango volvió a prender la chispa… y con una nueva remontada se llevó el segundo juego de la serie inaugural, ahora por pizarra de 5-3, asegurando así la serie frente a una novena saltillense que arrancó con fuerza, pero se fue apagando en los innings finales.
Los del Sarape iniciaron con buen ritmo: en el segundo episodio, Alejandro Mejía pisó el plato tras un triple remolcador de José Peraza, y minutos después, el mismo Mejía impulsó con sencillo a Jhonny Santos para el 2-0. El dugout visitante festejaba con confianza, y parecía que los fantasmas del juego anterior quedaban atrás.
Pero en el beisbol, como en la vida, no se puede bajar la guardia.
El abridor de Durango, Aaron Fletcher, se mantuvo en la loma por cuatro entradas y un tercio, recibiendo 8 imparables y 2 carreras, pero dejando el trabajo a un bullpen que se convirtió en muralla. Edwyn Valle, Manuel Chávez, Jorge Sauceda, Tyler Duffey y Héctor Pérez apagaron los bates saraperos, permitiendo apenas una carrera más en todo el juego.
La reacción duranguense arrancó en la baja de la cuarta, con un cuadrangular monumental de Daniel Johnson que viajó 412 pies por el jardín central. Fue su segundo jonrón de la joven campaña, y la señal de que el equipo local no iba a rendirse.
En el sexto, Alonso Gaitán empató la pizarra 2-2 con un sencillo que remolcó a Alfredo López, encendiendo a la afición del Francisco Villa.
Y fue en la octava donde Caliente soltó todo el fuego. Un doble de Nick Williams, seguido por un imparable de Manuel Boscán que trajo el 3-2. Después, Roberto “Bebo” Pérez castigó la estrategia saltillense de subestimarlo, conectando un doblete que remolcó dos más para el 5-2. El daño estaba hecho.
En la novena, Saraperos intentó una última reacción con una carrera frente al cerrador dominicano Héctor Pérez —quien sustituyó al lesionado Neftalí Feliz—, pero el esfuerzo fue insuficiente. Pérez se repuso, sacó los outs finales y selló el triunfo y el salvamento.
Así, Durango se lleva la serie 2-0 con sabor a épica, mientras los Saraperos deberán buscar en el tercer duelo una respuesta que evite el desliz completo.
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